consuelo.

...tenía los tobillos llenos de arena
y no dejé que entrara en mi cama.
Nunca me he arrepentido tanto de una estupidez como esa.
Desde entonces no puedo dormir

sin arena entre las sábanas.

to melt down.

y el mundo cae, y viene y entra
y sale ardiendo
por sus caderas las llamas y lenguas,
de fuego perdón,
no se nos pongan celosos los cometas.

-hablabas del sol?
-claro, mi sol era ella.

qué me pierdo...

No me gusta la manera en que se callan las estrellas
Cuando te han visto tantas veces reir,
sin mí.
Ojalá me lo contaran,
me dijeran:fue por ti.


Mientras tanto aquí siempre es de día
las noches no cuentan,
si es dormir.

proximamente ajeno.

Creo que la gente va a otro ritmo.
Como historias ya contadas o chistes con la gracia ya gastada.
No sé de qué viven cada día, no lo comparto.
Y los que se quedan como un viento en mi onda,
acaban pasando frio..
más tarde o más temprano..
No querré ni yo saber de qué va el invierno.

Por intuición.

Respirar, es a veces un estado.
Un estado de inhalación de posibilidades, de sueños
De historias inconfesables que te recuerda el aire en su ir y venir cargado de aromas, transportando todo lo necesario para envolverte y embriagarte.

Puede que un momento cualquiera, de algún día especial, lo recuerdes también por como respirabas.
Por como es de fácil dejarse llevar en todo, cuando te dejas llevar por algo tan intuitivo como respirar.

Tan solo quedarme quieta, con tanto y nada a mí alrededor,
quizás con alguien, alguien que me haga difícil respirar,

O alguien por quien respirar.

Ayer,

Sabe a conclusión precipitada,
a colores sin teñir.
Me preocupa porque no tiene fuerzas,
y fuerza a los demás a perseguir.
A veces la seguiría a donde fuera,
entre los soles de agosto
y las lunas de abril.
Creo que tenía un nombre...
...uno en desuso, ya sabes,
de esos que nombras, y vuela polvo añil.

Qué preciosidad de destino,
ser recordado y sonreír.

bravery

Le gustaba echarse a andar por la orilla.
-¿hasta donde irás?
-hasta el final.

Se paraba en las rocas
siempre, se paraba en las rocas.

Cuentan que volvió de alli con la piel suave y bronceada
sin conversación y sin sonrisa.

También dicen que fue en una de esas playas donde se contagió de sida.

Ella, que siempre desataba mil pasiones
no quiso volver a atar ninguna.

Daba miedo enamorarse de ella.verdadero miedo.

Yo nunca fui un cobarde.

ardiendo.

Para, detente.
No pienses en respirar, no escuches, sólo
siente.

Como gotas de rocío
deslizándose ardientemente por un canto,
así busco yo deslizar la piel al tacto.

Y humedecer los labios
y el cuerpo,
al ritmo de un corazón desbocado.

Acabarán sintiendo celos los relojes,
por prescindir de ellos estirando
el mismo segundo de placer más alto
a lo largo de sus minutos pesados.

levedad.

La intensidad de un breve toque,
se hace grande al recordarla.


No vivamos como proyecciones ya fijadas,
sino descalzas,
entre arenas frías de playa.

De mi mano colgarán cristales.
De su mano, mis hadas.

ensoñación.

Busquemos entre los corazones del fracaso, un recuerdo inmediato.
Un querer y un no decir, un vivir y un no existir.
Un duelo entre la expresión y la razón,
Quizá el comienzo de un amor.

Olvidémonos de lo imborrable, Rescatemos lo perdido.
Si el hielo ya no es frío, ¿qué arder será infinito?
Piérdete entre el falso bosque,
No caigas en la red de su belleza.
Demuéstrale al coraje tu presencia,
dale al fin al nombre, esencia.

Si cayendo en aguas infinitas,
Buscamos un camino sin destino
Entonces ¿para qué nadar sin alas?
Mejor volar, sin un motivo.

Yo no buscaba comerme el mundo
Buscaba que el mundo no me comiera a mí.
Que no me tragara entre sus urbes
Que no me convirtiera en una más
Que no me rebajara a una cifra,
Que me diera algo más que un nombre
Que una identidad.

Yo no buscaba comerme el mundo,
Buscaba comerte a ti.
Te encontré entre un acierto y un pecado
Los errores no existen para mí.

Yo no buscaba comerme el mundo
Buscaba sonreír

Yo no buscaba comerme el mundo
No lo buscaba
Pero lo conseguí.