lunes, 30 de noviembre de 2015

No se puede ser sólo un hombre contra el hombre.


Hace falta el valor del miedo, quien no lo tuvo no supo enfrentarlo.
La certeza de la necesidad de duda,
lo conveniente de abandonar aquello que convino.
Abrir más ojos y más bocas.
Buscar tu yo en el bando opuesto.
Desestimar estimas que resultaron espinas en la médula del cambio.
No vale nacer, vivir, morir,
sin hacer, sentir y oír.


Que si el enemigo eres tú mismo, y no te has reconocido, ¿cómo vas a combatirlo?
Pararse, analizarse, ¿qué he realmente defendido?
¿He vivido o he matado, gracias a mi vida inerte?
No puedes quedarte simplemente indiferente,
ni mantenerte siempre al borde,

no se puede ser sólo un hombre contra el hombre.

lunes, 23 de noviembre de 2015



No importa el sentimiento común
de ser dos, en mil hojas.
El otoño, a los cuadernos,
también llega y los deshonra.


lunes, 16 de noviembre de 2015

En la imagen de tus venas, convirtiéndose en raíces de árboles milenarios,
fijé durante tanto rato el pensamiento, que al querer hablar, ninguna palabra supo inaugurar mi boca.

Sin saber qué hacer con el hambre por tu hambre, desmantelé cualquier pauta de comportamiento, y no supe enfrentarlo con cautela.

Avancé, hasta quedar varada en este cruce de instintos.

Mañana, según dicen los diarios,
seré otra, y hará frío.