miércoles, 24 de junio de 2015

De sal, las cenizas.

Me imaginé dedos, saliendo de la arena, rogando temor.
A la noche nadie encontraba los cuerpos, ni las olas. Habían desaparecido, convirtiendo esta playa en una especie de purgatorio sin almas, pues lo que se juzgaba no era al hombre, no al menos como creador,  sino al hombre como creación, quizá precipitada, quizás injusta,  desde luego cruel con la naturaleza.


miércoles, 3 de junio de 2015

"degrado"

Viene, de golpe.
La sensación de encierro.
Las cuatro paredes, el metal.
Un raspón húmedo, viscoso. Lento.

Busco la Nada, su protección. Su peso.
Un escudo, contra intenciones y pensamientos.
Contra el dolor frío,
Y lo rígido del lodo en mis huesos.

En la columna, 
una vértebra,
 me paraliza.

Busco un auxilio, un templo, Delfos.
Ansío una huída que no sea la mía.
Un: que no lleguen, ni a pensarloellos.